Taller Internacional Online
EL FUEGO DE LA PRESENCIA
COMUNICACIÓN TRANSPARENTE
Aplicada a las comunicaciones virtuales
Sábado 9 de Mayo 2020 - 11:00 a 13:00 UYT / 16:00 a 18:00 CEST
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CURSO INTERACTIVO
CIENCIA INTERIOR
DESCUBRIR NUESTRO POTENCIAL
Según las enseñanzas de Thomas Hübl
por Giselle Charbonnier
ESTE ES UN CURSO VIVENCIAL
Sugerimos disponer un tiempo aproximado de 90 minutos para aprovecharlo en profundidad
La CIENCIA INTERIOR es la ciencia del misticismo. Es una ciencia que solo podemos comprender por sus efectos. Solo podemos percibir sus leyes a través de un estudio profundo de la realidad y a través de alinearnos y vivir según estos principios. Esto es lo que han hecho los grandes santos y místicos de todas las tradiciones espirituales: han contactado con formas de acceder a una inteligencia superior, a una realidad superior a través de prácticas de purificación de los sentidos, y de llevar un estilo de vida en armonía con un orden basado en esta consciencia mayor. En la base de la mayoría de las religiones y tradiciones místicas, en su esencia, hay profundas coincidencias. La ciencia interior recoge estas coincidencias, estos principios universales, como un cuerpo de conocimiento vivo, que sólo puede ser comprendido cuando es sentido.
"La Ciencia Interior es la ciencia de los orígenes y la esencia de nuestra experiencia, el estudio de las estructuras de la conciencia como se experimentan desde el punto de vista de la primera persona" Thomas Hübl
SI ESCUCHASTE EL AUDIO PUEDES ELEGIR:
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LEER los conceptos expuestos
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o pasar a la MEDITACIÓN
UN ESTUDIO TRANSFORMADOR
Los principios místicos son como llaves que abren dimensiones del ser. Cuando estamos en armonía con estos principios, nuestra vida está en permanente actualización, en armonía con el fluir de nuestro entorno. Estudiar misticismo tiene un efecto transformador instantáneo. ¿Por qué? Porque estos principios involucran a mi ser por completo. Para comprender estas leyes, tengo que alinearme completamente desde mi corporeidad, mi emocionalidad y mi pensamiento con algo que me trasciende, y esto, inevitablemente, activa ciertos mecanismos a nivel biológico. Es como encender un fuego en nuestro interior. El fuego místico enciende mi vitalidad y mis emociones, e inspira mi pensamiento. Entrando en este proceso de transformación interior, mi sola presencia es en un agente de transformación en mi entorno.
“Al integrar la división interior-exterior de la realidad dentro de mí, me convierto en una partícula psicoactiva dentro de un mundo interdependiente. Una vez que localizo ese lugar en mí mismo, empiezo a convertirme en una respuesta. De lo contrario, soy parte de la fragmentación y la pregunta. En la interrelación, en la interdependencia, está la respuesta.”
Thomas Hübl
EL DÍA A DÍA DE NUESTRA PRÁCTICA: REFINAR LA INTENCIÓN Y LA ATENCIÓN
¿Y cómo llegamos a esto? Llegamos a través del cultivo de la atención y de la intención. Primero que nada establezco una clara intención de alinearme con el sentido más profundo de mi vida. La intención de estudiar los principios místicos es la intención de alinearme con lo sagrado. Esto es estudiar ciencia interior. Al mismo tiempo, me propongo cultivar la calidad de mi atención. Es decir, refinar mi atención e ir colocándola cada vez más al servicio de mi intención. Prestar cada vez más atención a lo sagrado, a cada detalle de mi vida, a la realidad que susurra por debajo de la superficie.
LAS LLAVES: MINDFULNESS, MEDITACIÓN y ORACIÓN
En la mayoría de las religiones y tradiciones místicas encontramos prácticas contemplativas que podemos definir como prácticas de mindfulness, meditación, y oración. Estas son nuestras principales llaves de acceso a nuestro potencial mayor.
Mindfulness, que en español podemos traducir como atención plena, es el cultivo de la atención. El cultivo de la atención es la puerta de entrada. Solo puedo acceder a dimensiones más sutiles de mi existencia estando atenta en mi vida cotidiana a todos los detalles que hacen la unidad de la trama de mi vida, estando atenta a señales sutiles con las que me puedo orientar por sobre el ruido del mundo exterior, y estando atenta a las consecuencias de mis acciones en mí y en los demás. De esta forma mis acciones se van alineando con mi intención mayor.
La meditación. No es algo que hacemos, sino algo a lo que nos abrimos. Como práctica, la meditación implica cultivar una intención clara de conectar, explorar y habitar dimensiones sutiles de nuestra existencia que trascienden lo racional.
La oración es establecer una relación desde mi corazón con lo sagrado; es la intención de conectarme con algo que me trasciende y, al mismo tiempo, de abrirme a la gracia de recibir. El poder de la oración está en la calidad de mi intención y de mi apertura a recibir.
EL OBJETIVO MAYOR
¿Cuál es el objetivo de estas prácticas de mindfulness, meditación y oración. El objetivo es alinearme y trascender la división; la división en mi interior y la división entre mi interior y mi exterior.
"Cada problema, cada síntoma que tengo en mi vida, es el resultado de una división. Cada interrogante es una división. Hay una pregunta y hay una respuesta que está allá afuera. Hay una brecha entre la pregunta y la respuesta... Al integrar la división interior-exterior de la realidad dentro de mí, me convierto en una partícula psicoactiva dentro de un mundo interdependiente. Una vez que localizo ese lugar en mí mismo, empiezo a convertirme en una respuesta. De lo contrario, soy parte de la fragmentación y la pregunta. En la interrelación, en la interdependencia, está la respuesta.”
Thomas Hübl
Hablamos de una consciencia sentida. No de un concepto, sino de una consciencia que sentimos por igual en nuestros pensamientos, en nuestro corazón y en nuestro cuerpo.
La forma de caminar hacia esta integración es expandiendo la capacidad de albergar al mundo en mi interior, que quiere decir abrir mi corazón, abrirme al entorno que me rodea, a las personas que me rodean; abarcar más del mundo en mi interior. Dejo de ser tan “personal”, pero soy más yo que nunca. En esta apertura yace la respuesta a nuestros problemas como comunidad global. En la interrelación, en la interdependencia es donde está la respuesta no solo a mis problemas sino también a los problemas globales.
Para qué necesitamos una ciencia interior, una ciencia mística? Para encontrar las pistas, las llaves, las señales para acceder a la conciencia de nuestra interdependencia. Solo desde esta consciencia podemos tomar decisiones globales como humanidad para los desafíos globales a los que nos estamos enfrentando…
En este punto quiero invitarles a una meditación guiada, que podrán hacer siguiendo el enlace aquí abajo. Pero antes, les dejo una cita de Albert Einstein, como evidencia de que, en última instancia, la ciencia y el misticismo solo pueden coincidir.
“El ser humano es una parte del conjunto que llamamos universo, una parte limitada en el tiempo y el espacio. Se experimenta a sí mismo, sus pensamientos y sentimientos como algo separado del resto, una especie de ilusión óptica de su conciencia. Este engaño es una especie de prisión para nosotros, que nos limita a nuestros deseos personales, y al afecto por unas pocas personas más cercanas a nosotros. Nuestra tarea debe ser liberarnos de esta prisión ampliando nuestro círculo de compasión para abarcar a todos los seres vivos y a toda la naturaleza en su belleza."
Albert Einstein
VIAJE INTERIOR:
SINTONIZAR NUESTRO INSTRUMENTO
Para esta exploración necesitas:
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Papel y lápiz o lápices de colores
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Disponer de aproximadamente 15 minutos.
… Tómate un tiempo para permitirte sorprenderte por tu mundo interior
y permítete escribir o dibujar sin pensarlo mucho...
El objetivo de esta escritura es conectar más profundamente con nuestra experiencia. Simplemente permitir que emerja información que no nos es usualmente accesible, sin juzgar ni analizar.
¿Cómo percibes?
Tu cuerpo
Tus emociones
Tu actividad mental
¿Cómo se relacionan entre sí estas tres dimensiones de tu experiencia?
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Tómate un tiempo para escribir:
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¿Qué sensaciones físicas estás percibiendo en este momento?
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¿Qué emociones sientes en este momento? ¿Qué emociones son más difíciles de acceder para ti?
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¿Cómo es mi actividad mental en este momento? ¿Me siento plenamente presente con este ejercicio? ¿Siento mi atención dividida con recuerdos o preocupaciones?
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Luego que hayas escrito acerca de estas tres esferas, tómate unos momentos para percibir el efecto que esta atención profunda tiene en ti.
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Finalmente te invito a escribir cómo podrías traer más sincronicidad a tu vida cotidiana para vivir en mayor armonía con tu cuerpo, emociones y mente.
LA PRÁCTICA EN COMUNIDAD
Ser agentes de sanación en nuestras comunidades implica un compromiso con nuestro crecimiento en relación. Si bien es posible y, a veces necesaria, la práctica espiritual en retiro, nuestras comunidades de práctica permanecen como uno de los pilares fundamentales de nuestro crecimiento. Las personas con quienes comparto el camino de crecimiento son espejo para mis puntos ciegos, son sostén e inspiración en mi proceso de transformación y de alineación con una ética mayor
LA COMUNICACIÓN COMO PRÁCTICA ESPIRITUAL
Quienes no hemos elegido caminos monásticos o de retiro para nuestra realización espiritual, necesitamos herramientas para desarrollar nuestra visión al mismo tiempo que participamos plenamente en nuestras comunidades.
La COMUNICACIÓN TRANSPARENTE es un set de prácticas basadas en el cultivo de la atención y el refinamiento de la percepción, o escucha profunda. Estas prácticas han sido desarrolladas por Thomas Hübl y sus estudiantes y están siendo permanentemente informadas y actualizadas con los últimos avances de las neurociencias, las teorías del apego, y las prácticas terapéuticas de vanguardia.
Los pilares de la comunicación transparente son:
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Sincronizar mente, emociones y el cuerpo.
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Conectar o escuchar el potencial futuro o consciencia superior, creatividad, capacidad de innovación.
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Sincronizar interior-exterior, o sea, expresar mi inteligencia de forma tal que co-creo una realidad exterior acorde con mi realidad interna.
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Equilibrar las estructuras que sostienen mi vida con un nivel acorde de espacio o apertura que me permita crecer.
EL TRABAJO EN TRÍADAS
El compartir en tríadas es una práctica fundamental de la COMUNICACIÓN TRANSPARENTE
LOS TRES NIVELES DE LA PRÁCTICA
La verdadera práctica espiritual es una práctica que antepone la voluntad divina a mi voluntad personal. Como tal, implica un compromiso profundo en vivir de acuerdo a nuestra consciencia mayor y de permitirnos ser transformados por esta consciencia a cada momento. Una práctica verdaderamente holística necesariamente abarca 3 niveles:
ENTRENAMIENTO de la INTENCIÓN y ATENCIÓN
Solo puedo entrenar lo que puedo sentir. Por esto decimos que la atención plena o mindfulness es la puerta de entrada. A partir del refinamiento de mi atención e intención puedo encontrar mis límites y mis incongruencias y, solo entonces puedo trabajar en las otras dos áreas de práctica.
INTEGRACIÓN / MUTUALIDAD
Mi experiencia termina donde dejo de sentir. La práctica de integración requiere coraje, requiere atreverme a ir más allá de donde termina mi mundo consciente y explorar mis bordes, mis heridas. Si no quiero tener conflictos, voy a limitar mi experiencia y mi conocimiento del mundo. Para la tarea de integración es fundamental tener compañeros de práctica, una comunidad de práctica y/o ayuda profesional para integrar las heridas más profundas.
ÉTICA
¿Si mi práctica me lleva a niveles profundos de conciencia, pero mi estilo de vida permanece inalterado, estoy alineada con mi práctica o con mis hábitos? La alineación ética quiere decir que yo no solo practico, sino que además, llevo una vida acorde con esta alineación, con estos principios superiores.
¿De qué se trata el trabajo en TRÍADAS?
Una persona comparte. Dos personas escuchan en presencia total. No estoy escuchando sólo con la mente, escucho también con mis emociones y con mi cuerpo tanto como puedo. Al mismo tiempo que ofrezco mi presencia para la persona que habla, también estoy prestando atención a cómo me afecta su proceso. Puedo aprender a regular hasta qué punto puedo estar abierto para otra persona sin juzgarla y sin juzgarme.
La persona que habla tiene, de esta forma, una oportunidad de expresarse en un campo de conciencia expandido, la presencia de quienes me escuchan con su atención plena. La presencia de las personas que escuchan genera un campo de conciencia tal que, por mí misma, yo me doy cuenta de la profundidad de las raíces e implicaciones de mis problemas, conflictos, o preguntas. En esa presencia expandida, algo se vuelve mucho más claro. Es como que si pusiera una luz en mi experiencia.
Los primeros pasos de esta práctica consisten en escuchar con presencia total sin hablar ni comentar nada sobre lo que escuchamos. Sentir plenamente a la persona que está hablando es el mejor regalo que le podemos hacer a alguien. Sentirlo. Dedicamos nuestra presencia plena, y vamos a recibir ese mismo regalo cuando sea nuestro turno. Más adelante, cuando los grupos ya tienen cierta experiencia, trabajamos el dar devolución o feedback. Este es un arte muy fino que requiere mucha precisión, pero que también lleva nuestra práctica a dimensiones profundas de intimidad, conexión y realización personal.
¿Te gustaría incorporarte a un grupo de estudios de CIENCIA INTERIOR?
